Pensemos en el agua en reposo de una pecera, consideremos un volumen pequeño en medio de la pecera, el cual se encuentra en reposo o equilibrio. Pero este volumen es atraído a la Tierra con una fuerza que es su peso. ¡Pero está en reposo! Lo que significa que el agua a su alrededor lo empuja con una fuerza igual a su peso. ¡Esto lo conocemos como principio de Arquímedes! Todo objeto sumergido en un fluido, sufre un empuje vertical igual al peso del fluido desplazado.
Podemos aplicar lo anterior para separar sustancias que flotan en agua de las que no flotan. Si tenemos una mezcla de virutas de madera y de aluminio, podemos separarlas en el agua, ya que la madera flota y el aluminio se hunde. Industrialmente se utiliza este principio para separar los minerales ligeros de los pesados en las minas.
Materiales:
• 75 ml de alcohol etílico de 70º o 96º
• 10 ml de aceite de oliva u otro aceite vegetal
• Un vaso de vidrio
• Una jeringa de 10 ml
• 50 ml de agua de la llave
• 1 varilla de madera para brocheta
Procedimiento:
Coloque unos 50 ml de alcohol etílico de 96º y unos 30 ml de agua corriente de la llave en el vaso.
Con la jeringa deposite unos 5 ml de aceite.
Si el aceite queda en el fondo, vierta un poco de agua, si queda en la superficie vierta un poco de alcohol hasta formar una esfera de aceite en la parte media.
La densidad del agua es de 1 (Kg/m3), la del alcohol etílico de 0.79 (Kg/m3) mientras que la densidad del aceite vegetal es de 0.9 (Kg/m3). Por lo tanto en este experimento entre el agua y el alcohol igualamos la densidad del aceite y como este no se combina con ambos responde al principio de la mínima energía, es decir, toma una forma esférica.
En un medio de ingravidez y después de haber pasado por una fase gaseosa o líquida, los objetos adoptan la forma esférica porque es la configuración geométrica de mínima energía.